Colección de discursos agrupados numéricamente
3.37. Los Cuatro Reyes
“Monjes, el día octavo de la luna creciente, los ministros y los miembros de la asamblea de los Cuatro Grandes Reyes estaban recorriendo este mundo [pensando]: ‘Esperamos que haya mucha gente que se comporta apropiadamente con sus madres y padres, que se comporta apropiadamente con los ascetas y brahmanes, que honra a los ancianos de sus familias, que observa los Uposathas, guarda los otros días de observancia y realiza acciones meritorias’. El día catorce de la luna creciente, monjes, los ministros y los miembros de la asamblea de los Cuatro Grandes Reyes estaban recorriendo este mundo [pensando]: ‘Esperamos que haya mucha gente que se comporta apropiadamente con sus madres y padres… y realiza acciones meritorias’. El día quince, el Uposatha de la luna creciente, los ministros y los miembros de la asamblea de los Cuatro Grandes Reyes estaban recorriendo este mundo [pensando]: ‘Esperamos que haya mucha gente que se comporta apropiadamente con sus madres y padres, que se comporta apropiadamente con los ascetas y brahmanes, que honra a los ancianos de sus familias, que observa los Uposathas, guarda los otros días de observancia y realiza acciones meritorias’.
“Monjes, si hay poca gente que se comporta apropiadamente con sus madres y padres, que se comporta apropiadamente con los ascetas y brahmanes, que honra a los ancianos de sus familias, que observa los Uposathas, guarda los otros días de observancia y realiza acciones meritorias, los Cuatro Grandes Reyes lo reportan en el cielo de los devas de Tavatimsa, cuando se encuentran allí sentados juntos en el vestíbulo del Concilio de Sudhamma: ‘Reverendos Señores, he aquí, hay poca gente que se comporta apropiadamente con sus madres y padres… y realiza acciones meritorias’. Y a causa de eso, los devas de Tavatimsa se disgustan [diciendo]: ‘¡Ay! La compañía celestial va a declinar y la compañía de los asuras florecerá’.
“Pero, monjes, si hay mucha gente que se comporta apropiadamente con sus madres y padres, que se comporta apropiadamente con los ascetas y brahmanes, que honra a los ancianos de sus familias, que observa los Uposathas, guarda los otros días de observancia y realiza acciones meritorias, entonces los Cuatro Grandes Reyes lo reportan en el cielo de los devas de Tavatimsa, cuando se encuentran allí sentados juntos en el vestíbulo del Concilio de Sudhamma: ‘Reverendos Señores, he aquí, hay mucha gente que se comporta apropiadamente con sus madres y padres… y realiza acciones meritorias’. Y a causa de eso, los devas de Tavatimsa se alegran [diciendo]: ‘Ciertamente, la compañía celestial va a florecer y la compañía de los asuras declinará’.
“Monjes, una vez en los tiempos pasados, cuando Sakka, el gobernante de los devas, estaba guiando el cielo de los devas de Tavatimsa, recitó este verso:
’La persona que fuera como yo,
debería observar el Uposatha,
estar completo en los ocho preceptos,
el día catorce y quince,
el octavo de la luna creciente,
y durante los días de observancia especiales’.
“Sin embargo, monjes, el verso fue recitado de manera incorrecta por Sakka, el gobernante de los devas, y no bien recitado. Esto ha sido declarado de manera incorrecta y no bien declarado. Y, ¿por qué así? Porque Sakka, monjes, el gobernante de los devas, no estaba libre de codicia, odio y falsa ilusión. Pero en caso del monje que es un arahant—alguien, cuyas corrupciones mentales han sido destruidas, que ha vivido la vida santa, hizo lo que tenía que hacerse, echó la pesada carga, alcanzó su propia meta, definitivamente destruyó los grilletes de la existencia, alguien completamente liberado mediante el conocimiento final— es conveniente para él decir:
’La persona que fuera como yo…
y durante los días de observancia especiales’.
“Y, ¿por qué así? Porque aquel monje está libre de codicia, odio y falsa ilusión”.