Colección de discursos agrupados temáticamente
Cakkhu Sutta
18.1. El ojo, etc.
Esto he escuchado:
En una ocasión el Bienaventurado estaba morando en la arboleda Jeta del parque de Anathapindika cerca de Savatthi. Entonces, el Venerable Rahula se acercó al Bienaventurado, le rindió homenaje, se sentó a un lado y le dijo:
“Venerable señor, sería bueno que el Bienaventurado me enseñara el Dhamma en resumen, de manera que, habiendo escuchado el Dhamma del Bienaventurado, pueda morar en soledad, retirado, diligente, ardiente y resuelto.
“¿Qué opinas, Rahula, es el ojo permanente o transitorio?”—“Transitorio, venerable señor”.—“Y, lo que es transitorio, ¿es insatisfacción o felicidad?”—“Insatisfacción, venerable señor”.—“Y, lo que es transitorio, insatisfactorio y sujeto a cambios, ¿puede ser considerado como así: ‘eso es mío, eso soy yo, eso es mi ser’?”—“No, venerable señor”.
“¿Es el oído… la nariz… la lengua… el cuerpo… la mente permanente o transitoria?”—“Transitoria, venerable señor”.—“Y, lo que es transitorio, ¿es insatisfacción o felicidad?”—“Insatisfacción, venerable señor”.—“Y, lo que es transitorio, insatisfactorio y sujeto a cambios, ¿puede ser considerado como así: ‘eso es mío, eso soy yo, eso es mi ser’?”—“No, venerable señor”.
“Viendo de esa manera, Rahula, el instruido noble discípulo experimenta repugnancia hacia el ojo, repugnancia hacia el oído, repugnancia hacia la nariz, repugnancia la lengua, repugnancia hacia el cuerpo y repugnancia hacia la mente. Experimentando repugnancia, llega a estar desapasionado. Mediante el desapasionamiento, [su mente] es liberada. Cuando es liberado, le llega este conocimiento: “esa es la liberación”. Y entonces, comprende eso: ‘destruido está el nacimiento, la vida santa ha sido vivida, lo que tenía que hacerse ha sido realizado y he aquí no hay más futuros estados de existencia’”.